Concierto de Absentia (24 abril 2008)

Anoche asistimos a nuestro primer concierto de Absentia. Perdimos la virginidad, como me dijo Fátima poco antes de empezar. Y he de decir en su favor que realmente me gustó bastante.

El sonido era malo, debido en gran parte al sitio donde se celebró. En mitad del campus universitario de Reina Mercedes (en Sevilla), entre facultades y al aire libre. Dificultó bastante que el sonido llegase limpio, muy especialmente en el caso de las voces. Afortunadamente eso no evitó que pudiéramos disfrutar de un rato (poco menos de una hora) bastante divertido, disfrutando de buena música.



Como con todo, hay cosas buenas y cosas malas. Empiezo primero con todo lo malo, porque ya que no se dignaron a tocar un solo dedicado a YoFriki, yo creo que hay que darles un pequeño tirón de orejas.

Lo primero que pensamos muchos de los que estuvimos allí es que dado el ritmo que llevan los instrumentos, la forma de tocarlos, el sonido... quizá el estilo musical fuese algo extraño con respecto a la forma de tocar. Me explico. Hay dos instrumentos que destacan con respecto al resto del grupo, la batería y la guitarra principal. No ya porque toquen mejor o peor -que sí, los cabrones son muy buenos- sino porque le imprimen un ritmo mas heavy, más tralla. Personalmente, hubo momentos en que me quedé un poco cojo al oír esos dos instrumentos llegando al orgasmo, pero en mitad de un tema que quizá sea demasiado "tranquilo" (notense las comillas) para poder aprovechar de verdad eso. Afortunadamente no ocurrió siempre ésto; recuerdo varios momentos en los que todo se unificó y por esos momentos ya valía la pena el concierto entero.



Las voces se oían fatal. No se muy bien por qué, aunque imagino que por temas de acústica. Fue una pena tener ahí delante a Fátima cantando y no enterarme de la mitad de las cosas. Tiene buena voz, pero imagino que sonará mucho mejor en un sitio cerrado más adecuado para ese tipo de canto. El único que sonó bien cantando fue el bajista, que también cantaba. Su voz sí sonaba clara y fuerte. Puede que los micros estuvieren mal ecualizados.

Salvando lo anterior, lo cierto es que estuvieron muy bien. Tienen un sonido que me gusta, la verdad es que tocan muy bien. Dani -batería- me confesó que se habían equivocado en varias ocasiones, y sin embargo no nos dimos cuenta en ningún momento, supieron capear bien cada problemilla y seguir adelante. En un momento dado, a Antonio -guitarra- se le rompió una cuerda y tuvo que seguir tocando el resto del concierto con la de otro grupo; incluso así, con una guitarra distinta que te cambia el sonido, el tío siguió adelante de una forma impecable. Me gustó especialmente la forma que tienen de jalear al público; en ningún momento se limitaron a tocar y punto, se preocupaban de que todo el mundo se lo pasara bien, volaron baguetas, dedicaron canciones, nos hicieron gritar, los guitarristas saltaron entre el público a tocar, nos invitaban a hacer los coros de Tell me why... en definitiva, se preocuparon de que los que estábamos allí nos divirtiéramos de verdad. Y eso, en mi opinión, les da muchísimos puntos. Porque realmente lo consiguieron.

A destacar aquí al cabrón de Carlos y su guitarra. ¡Se atrevió a tapear el maldito! El tío es muy bueno y nos dio una buena sesión de caña de lomo anoche. Siendo sincero, yo no esperaba que en un concierto como ese, frente a la facultad de biología, de una forma tan cutre -me refiero al tipo de concierto, no a la música en sí- fuera a hacerme vibrar realmente, pero este tío lo consiguió, y no una sola vez. Y me consta que no sólo fue a mí, oí de todo entre el público. A la batería, Dani también es realmente bueno. Imprime un ritmo salvaje y realmente da ganas de saltar y vivir la música. Dani es buen amigo de gran parte de la redacción de YoFriki desde hace años, y teníamos muchas ganas de escucharlo porque lleva todos esos años hablándonos de su batería muy emocionado. Alguien con tanta pasión por un instrumento debía ser digno de escuchar, porque al margen de que lo hiciera mejor o peor, se iba a notar que lo disfrutaba de verdad; y joder si se nota.



En resumen, el -poco- rato que pude escucharles me pareció fantástico. Suenan muy bien y saben dar espectáculo. Aunque hay cosas que no salieran del todo bien, lo bueno lo compensa de sobras. Creedme, realmente merece la pena. Diría que lo mejor del concierto fue cuando se pusieron con Living in a Cloud, y el tema que cerró el concierto, Black & White, son los que mejor tocaron, me gustaron mucho.



La lista de temas de aquella tarde-noche es:

1- World of Chaos (Black & White)
2- Damages from Sin (Black & White)
3- Wind of Sorrow (Black & White)
4- Son of Hate (Black & White)
5- Living in a Cloud (Ritual: Part One)
6- Tell Me Why (Ritual: Part One)
7- Another Gate to Hell (Black & White)
8- Black & White (Black & White)

Lo que figura entre paréntesis es el proyecto o futuro EP donde se encuentran.

Y bueno, los componentes del grupo son:

Fátima: Cantante
Antonio: Guitarra y cantante
Carlos: Guitarra y Coros
Luis: Bajo, teclista y cantante.
Miguel: Teclista y bajista
Dani: Batería... a secas.

El día 2 de Mayo volverán a tocar en la Sala Q (Sevilla) en el Mingatron. Os recomiendo muy encarecidamente a todos los que podáis hacer un hueco que os acerquéis a verles, porque siendo un grupo joven sin demasiada experiencia, cuando empiezan a tocar convierten el concierto en un espectáculo. Saben cómo tratar al público, cómo disfrutar en los conciertos y cómo hacer que incluso la última pija de la universidad vibre y salte haciendo los cuernos como el que más (y de esto último hay testigos, que aún estoy boquiabierto).



No los perdáis de vista, no me extrañaría que llegaran alto.