Crítica: Cloverfield (Monstruoso)

El otro día fui a ver Cloverfield (aquí en España la han llamado Monstruoso). Lo cierto es que es una película que no deja indiferente a nadie. Todas las noticias que me han llegado hasta el momento son o bien que ha gustado mucho (como es mi caso) o que no ha gustado nada (un beso a Tati o Elena). Y es normal, dada la aproximación a la historia que se hace aquí. La campaña de marketing ha sido acojonante, y sin duda ha influido muchísimo en el éxito que está teniendo, antes os dejé un artículo hablando sobre ella.

En resumen, la historia es la de Godzilla: un buen día, sin razón aparente, aparece un monstruo de unos doscientos metros de altura, y empieza a meterle bocaos a los edificios. Nos meten en la historia a través de la cámara de un chico que estaba en una fiesta en ese momento y empieza a grabarlo todo. Personalmente, encuentro fascinante la manera que tiene el director de jugar con el espectador, pasando del suspense al impacto de una forma bastante buena. No es cine de terror ni pretende serlo, así que miedo poquito, aunque hay una escena que a mí personalmente me heló la sangre.

La película empieza con media hora de soberano aburrimiento. Básicamente es la fiesta de los chavales. Teniendo en cuenta que los personajes son menos carismáticos que los de Titanic, esa fiesta se hace bastante pesada; no aporta nada y ni siquiera es necesaria para el desarrollo de la trama. Pero sí que ayuda en algo. Ayuda a que cuando, media hora después, la película empiece, no estés preparado para el ritmo. Y es que el tempo es perfecto cuando se deja de tonterías y va a lo que sabe, al desconcierto, la persecución y el suspense, te zarandea de un lado a otro y te mete de lleno en la situación. No obstante, el guión peca de ser algo pobre, la película entera podría resumirse en tres o cuatro frases (que no diré aquí, tranquilos). Pero ni falta que hace... realmente lo que busca el espectador medio en una película de estas características es la invasión en sí del monstruo, no un desarrollo innecesario de personajes, así que para gustos los colores.

Y ya que hablaba de guión, lo cierto es que tiene algunas cosas que básicamente tienes que creerte. Licencias bastante ilógicas si las piensas en frío (como por ejemplo que en mitad de todo este lío, el puto chaval siga grabando con la cámara en vez de mandarla al carajo y echar a correr), pero necesarias para que la película pueda continuar al mismo ritmo. Me recuerda en cierto modo (y salvando muchisisisisisimo las distancias) a las películas de Indiana Jones, en cuanto a que no para, están pasando cosas todo el tiempo, y cuando hablamos de cine entretenimiento (como es el caso) esto es algo muy importante.

MINI-SPOILER:
Las críticas más fuertes que se le están haciendo a la película vienen del hecho de que no te cuenta nada. Y es cierto, es una película en la que no va a haber una historia que te diga "mira, el monstruo es en realidad una uña del pie de fernando romay tuneada por un cani y soldada en el lomo de un escarabajo pelotero". Nada de nada. Vives la historia de un chico con una cámara, ni más ni menos. Ni hay héroes armados hasta los dientes ni superdotados que descubran el punto débil del monstruo. Aquí ves como el ejército bombardea al bicho con lo que tiene mientras los protagonistas corren tratando de salir de allí como puedan. Y bueno, sí, es cierto que al acabar te deja con la duda, no sabes nada, no tienes ni idea de nada... pero también es cierto que lo considero su mayor acierto. El suspense, el desconcierto, funcionan así a la perfección, no sabes en ningún momento qué puede ocurrir. Si tuviésemos más información sobre lo que ocurre, nada sería lo mismo. Y probablemente así será en la secuela... nos darán a un marine armado hasta los dientes y no habrá quien la vea... Por otra parte, el hecho de que sepamos poco del monstruo no debería implicar necesariamente que no podamos contemplarlo a sus anchas destrozando. Lo cierto es que dado que los protagonistas por lo general se encuentran huyendo en dirección contraria, pocas veces podemos disfrutar de la que va formando a su paso.
FIN MINI-SPOILER.

Los efectos especiales son impresionantes. Parece mentira que dado el bajo presupuesto de la película (apenas unos 25 millones), la película sea capaz de mostrar ciertos planos absolutamente apocalípticos, muy creíbles y que aportan además mucho realismo a la película. Son rápidos, sólo lo necesario, pero joder. Es grande eh.

En fin. Es una película que desde mi punto de vista es redonda. No es una obra maestra que tengamos que recordar dentro de cien años en escuelas de cine, pero desde luego aporta mucho al cine de monstruos. Rara vez una película consigue zarandearte de esa manera, haciendo incluso que no pierdas la sonrisa. Confieso que he pasado varias escenas absolutamente boquiabierto, extasiado con lo que veía. Por supuesto que tiene puntos malos, como los citados anteriormente o que puede marear en algunos momentos (el cámara debería haber fumado algo en la fiesta que lo calmase un poco, por dios), pero no desmerecen el conjunto. Ya podía aprender Emmerich.



Conclusión: YoFriki-Recomendada.

Y aquí el trailer de la película (en castellano):