Nostferatu en Sevilla

Durante estos días se está celebrando la quinta edición del Festival de Cine Europeo de Sevilla, Así que los redactores de YoFriki estamos intentando ir a todas las sesiones que podemos (doy fe de que Max, nuestro más querido redactor fantasma, se está empapando de todo lo que pilla).

Lamentablemente, los redactores de vuestra web amiga no tenemos todo el tiempo que nos gustaría, así que no podemos hacer una cobertura del evento como se merece. De todas maneras sí que voy a hablar de lo que vimos anoche tanto Legoland como Max y un servidor: Nosferatu.

El día no era el mejor (un lunes), la hora no era la mejor (23:30, teniendo en cuenta que era un lunes) y la cinta ya la habíamos visto hasta la saciedad, pero el hecho de ver un clasicazo del cine de terror (y tan clásico, la película data de 1922) en pantalla grande y en el incomparable marco del teatro Lope de Vega tenía un algo seductor al cual no nos podíamos negar.

La primera sorpresa (o más bien el primer susto) nos lo llevamos al ver la entrada que habíamos comprado, en donde rezaba:

"NOSFERATU | CINE DE MEDIA NOCHE | Dir: Terence Fisher"

Un momento, ¿Terence Fisher (prolífico director del género de terror, cuya obra se concentra, sobretodo, en los años 40-50)? ¿Pero Nosferatu no era de Murnau?

Luego comenzó la película y resulta que sí, que nos pusieron la obra de Murnau, así que supongo que ahora poseemos un raro artículo de colección, una entrada de Nosferatu con una errata bien gorda. Dentro de unos cincuenta años valdrá unos cuantos miles de euros y podré comprarme un jueguecillo de la Nintendo PlasmaEX, por fin en HD.

La siguiente sorpresa nos la llevamos al entrar en el recinto de proyección (el teatro en sí) y ver que, junto a la pantalla, había un piano y un instrumento de viento que no pude identificar (en fin, soy miope y aquello estaba oscurito). ¿Van a proyectar la película con música en directo? Pues sí, así fue, y debo decir que, ver un clasicazo del cine mudo, en un teatro como el Lope de Vega, y con música en directo es una auténtica gozada. Sólo había un pero...

... y es que la música, en su mayor parte, no pegaba ni con cola. Las melodías en sí estaban de puta madre, preciosas y ejecutadas con maestría. Es más, en algunos momentos sí que colaboraba con la película y ayudaba a crear ambiente, pero eran los menos. Durante una gran cantidad de escenas la banda sonora se dedicaba a tocar pasajes y movimientos demasiado rápidos y alegres (¡alegres! ¡Nosferatu con música feliz!). Esto se acentuaba en las escenas con movimiento, como por ejemplo los viajes en carroza o en barco. Y la gota que colmó el vaso fué durante la escena en la que el conde Orlok (Drácula, para los amigos y los directores con derechos de explotación de la obra de Bram Stocker) transporta por las calles de Londres un ataud hasta su nueva casa. La música era mucho más propia de una comedia, tanto es así que la gente que estaba sentada detrás nuestra se reía. ¡Reirse con Nosferatu! En fin.

De todas maneras la velada mereció la pena, el buen cine siempre merece la pena.

Bueno gente, los que paséis por Sevilla estos días (y los que viváis en ella, claro) no dejéis de pasaros por las distintas sesiones del festival, ya que hay mucho, muy interesante y a precios razonables (3€ por pase). Pues nada, a ver si me da lugar a verme alguna que otra obra maestra antes de que cierre el festival el día 15.


Aquí os dejo el enlace a GoogleVideos (sí, eso existe aún) para ver Nosferatu.