Errar es de humanos...

...y rectificar es de sabios, así que a eso vamos.

Hace unos meses escribí un artículo hablando sobre una mala experiencia tenida con una empresa que, a partir de ese día, pasó a formar parte de mi lista negra de archienemigos. La empresa es MierdaMarkt MediaMarkt.

Y es que todo venía por un cambio en su política de devolución de productos mediante la cuál pasaban a reintegrar el importe del producto a devolver mediante una tarjeta regalo de MediaMarkt (por lo que te obligaban a que tu pasta se quedase en la tienda) además de endurecer significativamente las condiciones de devolución. Después de esto (y de lo que ocurrió en el artículo que escribí en aquella ocasión) decidí que nunca volvería a comprar nada en Media Markt.

El caso es que he vuelto a hacerlo. Aviso que no quería, que me negué firmemente, pero bueno, me hacía falta una mochila para el portátil y la variedad (y precio) de la cadena que nos atañe me parecían bastante buenos.

En fin, que después de mucha insistencia por parte de mi señora accedí a visitar el antro maligno y a adquirir la dichosa mochila. Además de ello, mi novia también se compró otra para su portátil y nos compramos algunos DVD´s de oferta.

La gracia llegó cuando mi novia, después de llegar a casa, se dió cuenta de que su portátil de 15,4 pulgadas no cabía en su flamante mochila especial para portátiles de 15,4 pulgadas. En ese momento me sentí tentado de decirle "Ahh te lo mereces, por querer comprar en esa mierda de sitio en donde no te devuelven del dinero", pero me callé, a medias porque sabía que me iba a ganar una hostia y a medias porque sabía que me tocaría a mí pelearme con MediaMarkt de nuevo...

Y así ha sido. Hoy ha sido el día en el que me he reencontrado con mi archi-enemigo, el diablo rojo que vende películas a precios tentadoramente bajos.

Pero cuál ha sido mi sorpresa cuando, al descambiar la mochila, me han reintegrado el dinero en metálico, sin ponerme ni un pero, ni preguntar ni nada de nada. Observé a la gente de al lado y también les estaban devolviendo la pasta. Estaba alucinando, al parecer han cambiado la política de devoluciones de nuevo y ahora vuelven a dar la pasta a los clientes a los que han estafado que no se sienten satisfechos con sus compras.

Bravo por MediaMarkt, que ha sabido reconocer sus errores y rectificarlos. Yo, como no soy menos, digo en este blog lo bien que lo han hecho al igual que en su día dije lo mal que lo hacían.

Es una estupidez como un templo, pero me siento como si, con mi monumental queja en este blog, hubiera puesto un granito de arena para solucionar una situación absolutamente injusta hacia el consumidor.

Ala, pues mira qué bien.


PD: Aunque MediaMarkt ya no esté, su director de marketing sigue estando en mi lista negra, y en un puesto destacado...