Sé que llevo mucho tiempo sin escribir aquí. No os voy a engañar, además de por estar ocupado, gran parte de la culpa la ha tenido la desgana.
Si os soy sincero, llevo tiempo queriendo volver a escribir para YoFriki, solo que, vete a saber por qué, se me había metido en la cabeza que, ya que volvía, tenía que hacerlo con algo que mereciera la pena. Siento deciros que no es así, realmente no tengo nada que decir que merezca la pena ser escuchado y mucho menos que interese a mucha gente.
Que cómo he llegado a esta conclusión. La respuesta es bien sencilla, porque soy raro.
Un ejemplo claro de ello es lo que tenemos (o hemos tenido recientemente) en la cartelera y las reacciones del público. Mientras que a mí Moon me pareció una obra maestra, la gente se agolpaba a ver la tremenda estupidez de G-Force (peli que no les gustó ni a los niños que había en la sala cuando yo la ví). Mientras me tronchaba de risa con la inteligente Si la Cosa Funciona, la gente me recomendaba La Cruda Realidad con argumentos tales como "tío, es Leónidas dando consejos sobre consoladores". Mientras que yo me quedaba con la boca abierta en El Secreto de sus Ojos, el resto de la gente babeaba con El Día de Mañana 2, o 2012, como quieran llamarla. Yo me lamento de que al final se me ha escapado Los Sustitutos y la gente me dice que cómo no he ido a ver Resacón en Las Vegas. En fin, por lo menos me libré de ver Jennifer's Body, que esa sí que le pareció mala a todo el mundo (¿acaso no era previsible, joder?).
Y ahora, mientras yo me muerdo las uñas porque no tengo tiempo de ver Celda 211 y de impaciencia por que llegue Avatar, la gente se agolpa a ver la nueva adaptación cinematográfica de ese consolador de mil páginas para pre-adolescentes llamado "Saga Crepúsculo". Sinceramente, espero que el cambio de director le haya sentado bien a la peli, porque la anterior no era más que un insulto a la inteligencia. Pero bueno, como el amor es ciego, bien podrían haber puesto un plano continuo del protagonista mirando el infinito mientras amanece (y empieza a brillar como un Drag Queen) que las niñas seguirían con las hormonas revolucionadas. Por lo menos, en los tiempos de Titanic, las niñas veían una buena peli de James Cameron...
En fin, que sí, que para gustos colores. Que seguro que más de uno piensa que la intimista Moon era un coñazo o que la increiblemente bella Big Fish era aburrida. Qué le vamos a hacer. Pero como esto es YoFriki, y los que aquí estamos navegando nos reconocemos a nosotros mismos como raros (miren la traducción de Freak), aquí me encuentro a gusto y puedo señalaros con el dedo desde mi rincón y deciros a todos ¡imbéciles!
PD: El hijo pródigo ha vuelto, a ver si consigo escribir de vez en cuando xD.